El 2 de febrero de 2025, en el municipio de Calimaya, Estado de México, se registró un asesinato que ha captado la atención tanto de las autoridades locales como de agencias estadounidenses. La víctima, identificada presuntamente como Mario Alberto Jiménez Castro, conocido bajo el alias «El Kastor», era un operador financiero clave para la facción del Cártel de Sinaloa conocida como «Los Chapitos».
La identidad de Jiménez Castro está siendo verificada por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), que señaló que el atacante se acercó a la víctima en el fraccionamiento Villas San Fernando, en la colonia San Andrés Ocotlán, y le disparó en varias ocasiones. La víctima portaba identificaciones que generaron su reconocimiento preliminar.
Sin embargo, la confirmación final de su identidad aún depende de la identificación oficial por parte de familiares, dado que se reportó que podría haber portado documentación falsa.
Videos de seguridad y testimonios de testigos presentes en el lugar del crimen también han jugado un papel crucial en la identificación de Jiménez Castro. Además, reportes en redes sociales y medios locales han confirmado que la licencia de conducir que portaba la víctima correspondía a un individuo con características similares a las de «El Kastor».
Mario Alberto Jiménez Castro estaba bajo la lupa de la Administración para el Control de Drogas (DEA) de los Estados Unidos desde antes de su muerte. La DEA, junto con el Departamento de Estado de EE.UU., ofrecía una recompensa de hasta 1 millón de dólares por información que llevara a su captura. Estaba acusado de ser un blanqueador de dinero para «Los Chapitos», siendo responsable de facilitar el lavado de ganancias del tráfico de fentanilo desde Estados Unidos hacia México, utilizando criptomonedas para ocultar estas transacciones.
El perfil de «El Kastor» en la organización criminal incluía la coordinación de intermediarios para recoger dinero de narcotraficantes en EE.UU. y depositarlo en billeteras digitales controladas por miembros de alto rango del cártel. Se estima que entre agosto de 2022 y febrero de 2023, bajo sus órdenes, se lograron lavar al menos 869 mil dólares en ganancias del narcotráfico.
Jiménez Castro no solo era un operador financiero; su relación familiar también lo posicionaba dentro de la estructura de «Los Chapitos». Era cuñado de Jesús Miguel Vibanco García, alias «El Jasper», otro miembro del grupo criminal recientemente asesinado en Culiacán, Sinaloa. Esta conexión familiar podría haber fortalecido su papel dentro del cártel, aunque los detalles específicos de su relación y su impacto en la jerarquía criminal no han sido completamente esclarecidos.
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